¿ Qué será de mí ? Las calles acusan girasoles enamorados, que vierten su incansable lumbre hacia el cielo. Mientras pasan transeúntes desprevenidos, de la ternura y su manos. ¿ Quién serás, para mí entonces ? murmura ahora un retazo, del barco que navega en mis adentros. ¡Ay suspiros !, responden mis preguntas y éste mar infinito, navega en mi barco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario