lunes, 30 de agosto de 2010

Las ciudades de trigo y sus hijos de pan.

Han huído los hijos, para que no quedase nadie
que  encendiera  la TV, ni respirase humo en las calles.
Se fueron en el viento aquella tarde,
para no quedar náufragos, para no sentir miedo o hambre,
para nos ser asaltados, para esquivar la desesperanza,
para no andar errados.
La ciudad les abrió las alas, para evitarles el destierro,
se hicieron azules los brotes dorados.
Dejaron todo para no ver caer los pájaros , para no oír las bombas,
los retazos.
Han huído los hijos, para no ser olvidados.

http://www.foto-gratis.es/detail/3175/Img01122008092677069170.html

miércoles, 25 de agosto de 2010

Cuando el mar no tuvo olas.

Y se podían ver los barcos esperando partir , allá, al otro lado del azul.
Algunos creían ver a las personas , saludando desde las costas lejanas. El mar ya no era infinito.
Los pájaros engañados por el reflejo,  se hundían en el agua buscando el cielo, pero corrían mejor suerte que Narciso y escapaban.
Los peces estaban inmóviles. Era para ellos un terremoto, tal quietud. Días extrañamente bellos. Las caracolas guardaban el sonido de las olas , como quien abraza la foto de alguien que ya a partido o acaso su ropa. Por esos días, las caracolas, valían más que las perlas.
Los marineros, creyeron haber perdido su tarea. ¿Un mar sin olas? Decidieron quedarse en la orilla y encender fogatas para atraerlas. Su intento, aunque poético, no resultó.
¿Y cómo es que volvieron las olas?
En el medio de la mar, un marino solitario, devolvió al agua los peces que tenía en la red, estos tocaron el agua y revivieron, el aleteo movilizó el agua, y los peces salieron volando.
Las olas, de regreso.

http://www.foto-gratis.es/detail/5699/Img0112200811567640520.html