domingo, 13 de enero de 2013

No dejaré

Las hojas queman los árboles, tras la línea azul del camino . Los transeúntes, quieren ser pasajeros y se acomodan a la tarde, rogando una gota de agua, un murmullo de arena, del reloj que parpadea insomne esperando que nos miremos los ojos, teñidos de mar y digamos que de ahora en más y desde aún antes , la vida es ensueño y sendero frutal. Si me hieren , me curo. Si me arrojan lejos, vuelvo. No dejaré que pase otro cielo sin nombrar a la nube, que viaja y desenvuelve algodones para niños abandonados, por la risa. Ni estrellas fugaces que prometen un futuro encendido Porque la vida es eso, flor, piedra y camino.

No hay comentarios: